¡Hola!
Hace unos días leí la novela Carol de Patricia Highsmith y la verdad
es que me ha encantado. Sin lugar a dudas, entraría en mi lista de libros
favoritos y se lo recomendaría a todo aquel que disfrute con la lectura. Así
que me gustaría contaros algo sobre la novela y su autora.
Título original: The Price of Salt
Título original: The Price of Salt
Autor: Patricia Highsmith
Editorial: Anagrama
Nº de páginas: 325
Año de publicación: 1952
Carol cuenta la historia de Therese Belivet,
una joven escenógrafa que se ve obligada a coger un puesto de dependienta en la
sección de juguetes de unos grandes almacenes. Es allí donde conoce a Carol,
una mujer treintañera y divorciada que busca una muñeca para su hija pequeña. A
partir de ese momento, Therese y Carol empezarán una relación que cambiará el
resto de sus vidas para siempre.
Patricia Highsmith publicó esta novela con el
título El Precio de la Sal en el año
1952 y bajo el pseudónimo de Claire Morgan, puesto que no quería ser
encasillada como una escritora de novelas lésbicas. De hecho, la crítica ya la
había encasillado previamente como autora de suspense, así que sabía
perfectamente que si publicaba Carol
con su nombre real no tardarían en volver a hacerlo.
El motivo principal por el que decidí leer Carol es que está considerada
la primera novela sobre relaciones lésbicas con un final feliz. De hecho, la
misma autora recibió una gran cantidad de cartas agradeciéndole el final de la
misma. No es de extrañar, puesto que una vez empiezas a leer la novela le coges
cariño a Therese, poco a poco entiendes perfectamente la situación en la que se
encuentra la protagonista. Te das cuenta de cómo pasa de estar saliendo con un
chico por el que no se siente nada atraída, a enamorarse de una mujer. Además,
son sentimientos puros y muy reales. Therese sabe que lo que siente por Carol
es amor y no lo confunde con amistad en ningún momento.
“ Siento que estoy enamorada de ti (…) y debería ser primavera. Quiero que el sol caiga sobre mi cabeza como coros musicales. Imagino un sol como Beethoven , un viento como Debussy, y cantos de pájaros como Stravinsky. Pero el ritmo es totalmente mío”.
Vemos
cómo la protagonista, poco a poco y gracias a Carol, va descubriendo su
verdadera orientación sexual hasta el punto de dejarlo todo por ella. Pero
probablemente, lo que más me llama la atención de Therese es que en ningún
momento intenta negarse a sí misma que
es lesbiana, simplemente lo acepta como algo que forma parte de ella.
Por otro lado, también podemos ver que Patricia
Highsmith mantiene el suspense de sus anteriores novelas. De hecho, encontramos
una persecución por parte del marido de Carol, que intentará por todos los
medios quedarse con la custodia de su hija. Todo esto hace que la
novela sea fácil de leer y resulte entretenida. Llega un punto en el que no
puedes dejar el libro porque necesitas saber cómo terminará la relación.
Otro aspecto que me ha resultado muy
interesante es que la novela tiene muchas referencias autobiográficas. Al
parecer, en el momento en el que estaba escribiendo Carol, Patricia Highsmith se encontraba en una situación económica
complicada, por lo que tuvo que aceptar un trabajo en unos grandes almacenes
donde conoció a una mujer que la dejó fascinada y la cual, al igual que Carol, buscaba
una muñeca para su hija. La diferencia está en que Highsmith nunca llegó a
conocer a la supuesta Carol, en la novela simplemente imaginó cómo sería ella
y, a partir de esto, creó su propia historia.
“Seguía siendo Carol y nadie más. Sería Carol en miles de ciudades y en miles de casas, en países extranjeros a los que irían juntas, y lo sería en el cielo y en el infierno.”
En definitiva, Carol es una novela que te hace sentir, pero sobretodo te hace
comprender lo difícil que era en aquella época amar a una persona del mismo
sexo. Muchos homosexuales tuvieron que pasar por terapias y otro tipo de
tratamientos inhumanos, como la lobotomía o, incluso, shocks eléctricos. Sin
embargo, en Carol vemos un atisbo de
esperanza y nos damos cuenta de que el amor entre personas del mismo sexo sí es posible a
pesar de los obstáculos.
Si os ha llamado la atención esta reseña os
recomiendo sinceramente que leáis la novela y la disfrutéis tanto como yo.
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